Posted by ALBERTO on March 11, 19102 at 08:18:40:
Venezuela-Colombia-Ecuador
Noam Chomsky
Entrevista con Heinz Dieterich. Del libro de Heiz Dieterich, Fidel Castro, Noam Chomsky, La cuarta vía al poder. Venezuela-Colombia-Ecuador, Buenos Aires, 2000.
¿Qué opinas de los procesos populares y revolucionarios en Ecuador, Colombia y Venezuela?
—A largo plazo, Venezuela será el más importante de los tres. Es un país muy rico, con enormes reservas de petróleo. Fue un dominio de los británicos, hasta que Estados Unidos los expulsó en los años veinte, bajo el presidente Woodrow Wilson. Desde entonces, Estados Unidos ha sido el poder dominante en Venezuela. De hecho, Venezuela fue el principal exportador de petróleo hasta los años setenta y todavía es uno de los más importantes para Estados Unidos. También tiene recursos importantes en otras materias que Estados Unidos ha explotado y, por lo tanto, no verá con buenos ojos que las cosas se salgan de control.
De hecho, una de las informaciones poco conocidas sobre la crisis de los misiles en Cuba, revela que una de las principales preocupaciones de los hermanos Kennedy consistía en que, si Cuba se volvía demasiado independiente, podía impedir los planes para una invasión estadounidense a Venezuela que se contemplaba en aquellos tiempos, debido a los movimientos guerrilleros y populares. Es decir, esto no es un asunto que Estados Unidos toma a la ligera.
Parte de la preocupación sobre Colombia está vinculada, de hecho, a Venezuela. En este momento, la posición de Washington frente a Venezuela es ambivalente. Me parece que nadie sabe con exactitud hacia dónde se dirige el proceso venezolano. Nadie sabe, qué parte del discurso de Hugo Chávez es populista y qué parte refleja una tendencia hacia reformas sustanciales. Estados Unidos está preocupado.
También existe un serio problema con las inversiones en la industria petrolera que han sido bajas, debido a la corrupción y al mal management en los últimos años, de tal manera que no puede aumentarse la producción con la velocidad que le gustaría a Estados Unidos. Es decir, es una situación compleja que Washington va a querer mantener bajo control y asegurarse que no vaya en la dirección equivocada.
—¿Por qué el viaje de Clinton a Colombia?
—Colombia tiene una terrible historia de violencia, que ha durado más de un siglo. En los años sesenta, esa violencia tomó un nuevo rumbo debido a una fuerte intervención del gobierno de Kennedy, con misiones de las fuerzas especiales estadounidenses que asesoraron a las fuerzas armadas colombianas. Eso fue parte del proyecto general de Kennedy de convertir a los ejércitos de América Latina en fuerzas de seguridad que controlaran a su propia población mediante la violencia. Se trataba del cambio de la estrategia de la defensa hemisférica —reminiscente de la Segunda Guerra Mundial— en las fuerzas armadas latinoamericanas, hacia la seguridad interna, es decir, hacia la guerra contra su propia población.
En Colombia, la misión de las fuerzas especiales estadounidenses instruyó específicamente a las fuerzas militares colombianas, a formar grupos de paramilitares, para llevar a cabo lo que llaman el «terror paramilitar» contra «conocidos proponentes comunistas» (known communist proponents). «Proponentes comunistas» es un término muy amplio que puede incluir campesinos organizados, lideres sindicales, activistas de los derechos humanos, intelectuales independientes, candidatos políticos, cualquier cosa; y esta política de organización del terror paramilitar —que incluía el entrenamiento respectivo— llevó a una nueva fase de violencia organizada del Estado: en parte a través de los militares y, en parte, a través de los paramilitares. Y esto ha continuado desde aquella fecha.
En los años noventa, Colombia tiene con creces el peor récord de violación de los derechos humanos en el hemisferio occidental; esto se debe, a que el terrorismo de Estado masivo en los otros países se redujo, de tal manera que Colombia saliera en primer lugar. De los casi diez asesinatos políticos que se cometen cada día, el Departamento de Estado atribuye la gran mayoría, un setenta a ochenta por ciento, a los paramilitares, que son muy cercanos a los militares. El resto se atribuye a la guerrilla.
El problema de la droga
La guerrilla ha logrado desarrollar ahora una base sustancial en gran parte de la población, a tal grado que el gobierno ha cedido básicamente una parte del país a la guerrilla, que por otra parte, nunca ha estado integrado a Colombia. En esas regiones, los campesinos han estado obligados, básicamente, a la producción de coca—, no porque alguien les haya puesto una pistola en la cabeza, sino porque simplemente no hay otra forma de sobrevivir.
Este problema se remonta a los años cincuenta. Colombia tenia producción de trigo (wheat) que fue socavada por agroexportaciones subsidiadas de Estados Unidos, bajo la fachada de los «alimentos para la paz» (food por peace). En Los sesenta, el Movimiento de los países no alineados (el Grupo de los 77) y la UNCTAD avanzaron la idea de formar un marco de referencia para un Nuevo Orden Económico Internacional (NOEI), que beneficiara a la producción de los campesinos pobres.
Uno de los primeros programas que UNCTAD trató de implementar fue la estabilización de los precios de sus productos (commodities), que oscilan grandemente según la oferta y demanda, entre otros factores. Una mercancía muy importante del comercio mundial entonces fue el café, que constituía una de las principales exportaciones de Colombia. Para el agrobusiness, las oscilaciones salvajes de los precios no tienen mucha importancia, porque si el precio de una mercancía baja en un año, ellos utilizan otras. Pero si eres un pobre campesino no puedes decir a tus niños: «no comas este año, quizás comamos el próximo». Es decir, los precios que oscilan son devastadores para pequeños productores.
La propuesta de estabilización de los precios de la UNCTAD —que concuerda con lo que sucede en los países industriales ricos, como Estados Unidos y la Unión Europa que estabilizan constantemente los precios internos no fue permitida para el Tercer Mundo: se bloqueó. Uno de los efectos fue que la pequeña producción campesina se hiciera inviable, y entre ella, la de café. Y muy naturalmente, de hecho, casi necesariamente, los campesinos se volcaron hacia productos que eran viables, básicamente coca, mariguana y los productos, que en Occidente se llaman «drogas legales». Después llegó la represión, lo que Llaman «la guerra contra las drogas», y ahora, todo esto es una parte considerable del sistema socioeconómico colombiano.
Clinton inundó Colombia con armas
El problema principal en Colombia, como lo ha sido durante largo tiempo, es una situación muy represiva en lo político y socioeconómico. Básicamente, es un país muy rico, pero gran parte de la población vive en una pobreza miserable. Tiene un sistema muy brutal y represivo. Un intento de permitir partidos políticos independientes, la Unión Patriótica, hace alrededor de una década, terminó en un desastre. Sus candidatos políticos, alcaldes, candidatos presidenciales etcétera, fueron simplemente asesinados. Los Estados Unidos no se dan cuenta de esto. Llaman a Colombia una democracia floreciente; no importa que el único partido político independiente fuera aniquilado por la violencia política. Lo Llaman democracia, porque los partidos que sobreviven son los partidos de los empresarios (business parties), los que se adecuan a los intereses de Estados Unidos.
Tal situación empeoró mucho más durante los años noventa. Particularmente, el gobierno de Clinton ha inundado el país con armas e instructores militares. Colombia recibe más armas y entrenamiento militar que cualquier otro país en el hemisferio y Junto con estos suministros aumentan, por así decirlo, «de manera normal», las atrocidades.
El Plan Colombia
El plan actual consiste en extender esto muy significativamente, dando a los militares 1,6 mil millones de dólares. El pretexto es la guerra contra las drogas, pero es difícil encontrar un analista que tome este pretexto muy en serio. Los paramilitares, al igual que los militares, están metidos hasta las narices en el narcotráfico y la guerra no se dirige contra ellos. La guerra se dirige contra las comunidades campesinas que se han vuelto parte de las regiones dominadas por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Las FARC levantan impuestos sobre el narcotráfico, Pero iban indicado que estarían muy contentos de implementar un programa con cultivos alternos; de hecho tienen un programa social de este tipo.
Recientemente, lideres gubernamentales y de las FARC fueron a Europa. Esto fue presentado aquí en el sentido de que las FARC tenían que ser civilizadas y tenían que presenciar, cómo los países civilizados funcionan. Esto no es precisamente lo que pasó. Lo que pasó es, que el gobierno colombiano —y el estadounidense también, si aceptara— mostraron que tienen que ser civilizados Para entender como democracias sociales funcionan. Yo no s6 si esto se logró, Pero si se lograra, seria un gran Paso adelante Para Colombia y los Estados Unidos, a fin de que implementaran políticas económicas y sociales más constructivas. Sin embargo, el cama . no que emprenden es cl financiamiento de los paramilitares y militares, lo que llevará a un mayor desastre. Justo esta mañana, los periódicos reportaron nuevas matanzas de los paramilitares en la región de Medellín, y esto se incrementará, porque los asesinos son del ejército.
Plan Colombia repite la contrainsurgencia de El Salvador
—Parece que el Plan Colombia está más en la lógica de contrainsurgencia de Centroamérica que de Vietnam?
—Yo creo que sí. Estados Unidos ha aprendido la tradicional lección imperial de que es un error mandar tus propias fuerzas militares a una guerra colonial. Es demasiado sangriento, demasiado horroroso, particularmente cuando se trata de un ejército de ciudadanos (citizen’s army) que no lo podrá hacer apropiadamente. Lo mejor es tener un ejército de mercenarios, es decir, respetar el patrón colonial tradicional. Gran Bretanña, por ejemplo, controló a la India básicamente con tropas hindúes; los ingleses fueron una especie de reserva. Este es el estándar. Recoges unas tribus de montaña, como los Gurkas y los usas.
En América Central, Estados Unidos ha seguido, normalmente, este patrón. Allí, las fuerzas mercenarias locales se llaman generalmente, «ejército». Pero, cuando no puedes tener esos ejércitos de tu lado, entonces formas fuerzas mercenarias en el sentido estricto de la palabra, como los «contras» en Nicaragua. También, con frecuencia, el ejército encarga la ejecución de las atrocidades a los paramilitares, como hicieron los indonesios en Timor oriental con las milicias o como se hace con los paramilitares en Colombia. Esto tiende a ser una buena idea, porque mientras los militares mismos ejecutan las atrocidades, es difícil para el gobierno estadounidense justificar internamente el apoyo militar. Cuando lo dan a los paramilitares —como sucede en la actualidad entonces la propaganda es más fácil. Por eso creo que las cosas en Colombia seguirán un rumbo más cercano a lo que sucedió en Centroamérica que en Vietnam.
Vietnam fue un error táctico y ha sido reconocido como tal, como tu ves, por ejemplo, en cl libro respectivo del ministro de defensa de Estados Unidos durante la guerra de Vietnam, Mc Namara. Este libro recibió muchos elogios porque supuestamente fue una disculpa, pero de hecho, no lo fue. No hay ningún arrepentimiento ante el pueblo de Vietnam y tampoco ante el pueblo de Estados Unidos, por cometer un «error táctico». Más bien, se aprende de los errores tácticos, para hacer las cosas mejor en el futuro.
—Hugo Chávez podría terminar como Salvador Allende?
—Venezuela es un país rico e importante, que tiene muchos problemas. Sus problemas económicos son muy serios y existe una deuda interna socioeconómica que tiene que resolverse. Mucha gente sufre seriamente, porque la riqueza del país no llega a ellos. Si habrá esfuerzos serios para cambiar esto con un programa popular de reformas —y si este programa incluye tomar el control sobre los recursos del país y usarlos para tales fines— entonces, los Estados Unidos no estarían muy contentos. Estados Unidos siempre ha estado en contra de esto. El grado de su descontento dependerá del nivel de cooptación que logre.
Ha habido situaciones de este tipo antes. Por ejemplo, en los años cincuenta, la CIA estimó que las dos peores crisis para Estados Unidos eran Bolivia y Guatemala. Ambos tenían gobiernos populares. En Bolivia, el gobierno estaba en manos de un grupo trotskista-laborista; en Guatemala, se trataba de los gobiernos democráticos de Arévalo y Arbenz. Y a Estados Unidos no les gustaron ninguno de los dos. Quería neutralizar y destruir a ambos. Pero lo hizo de maneras muy diferentes.
En el caso de Guatemala, simplemente organizó una invasión militar que derrumbó al gobierno e inició cuarenta años de masivo terror. En Bolivia, usó un camino diferente: esencialmente cooptó al gobierno, lo que, en cierto sentido, fue sorprendente, porque técnicamente se trataba de un gobierno marxista, de una dirigencia trotskista. Pero, lentamente los integraron al sistema estadounidense y terminaron subordinados al poder estadounidense. De hecho, estas son decisiones tácticas.
Ecuador y la dolarización
En Ecuador es una historia diferente. Tiene una gran comunidad indígena que se trata extremadamente mal y que se levantó el 21 de enero para institucionalizar un cambio, pero que fue socavada por chicanearías, subterfugios y política sucia. Existe una mala situación económica, al Igual que en el Perú y, de hecho, en toda la región andina. Qué rumbo tomará esto, es difícil de prever. Podría haber una rebelión indígena.
¿Qué función tiene la dolarización?
—Tiene sus ventajas y desventajas para un país. Mantiene la moneda estable, pero lo hace con el costo de no tener ningún programa socioeconómico nacional, porque se está a la deriva de otro país. Alrededor de la mitad de la población mundial, de una u otra manera, ya no tiene ningún control, ninguna soberanía sobre su planificación económica nacional. Esta la hacen los burócratas en Washington, ya sea porque los países tuvieron que entregar su autoridad de planificación a raíz de la crisis de la deuda, ya sea debido a mecanismos como la dolarización. Lo que esto significa para un país particular, no se puede expresar con una regla general. Sin embargo, es siempre negativo en el sentido de que equivale a abandonar la propia soberanía.
La entrega del Canal de Panamá
—¿Por qué Washington entregó el Canal de Panamá?
—La razón es, que en la actualidad el Canal es mucho menos importante para el poder estadounidense de lo que fue en el pasado, debido a los cambios en la tecnología y los modos de transportación; por ejemplo, grandes buques tanques no pueden pasar por el Canal.
Por otra parte, Washington espera que el Canal se administre dentro de los parámetros que ha definido; puede ser administrado localmente por panameños, pero dentro de los partidarios globales definidos por Estados Unidos. Si esto no sucede, Estados Unidos simplemente lo retoma. En este sentido, es como el Canal de Suez. No hay problema de que sea administrado localmente por los egipcios, siempre que se mantengan dentro de un marco de referencia impuesto y aceptable para Occidente.
—Entonces, ¿no tiene ningún sentido antiimperialista o anticolonial?
—Sí, alguno sí. Refleja los cambios que ha habido en el sistema de dominación mundial; cambios que se han dado durante mucho tiempo. Durante el siglo XIX, el modo de dominación fue la ocupación militar. Pero desde entonces observamos una tendencia, hacia la entrega parcial de algunas tareas a administradores locales. Estos, por supuesto, tienen que jugar conforme a las reglas del juego, si no, tienen problemas.
—Finalmente: ¿importa para América Latina, quién gane las elecciones en Estados Unidos?
—No, no mucho.